Con motivo de los actos conmemorativos de efeméride cofrade del LX aniversario de la bendición de la imagen de la Virgen de los Dolores y Misericordia, ayer, se celebró en la capilla de Molviedro, una conferencia ilustrada a cargo de Antonio Bermudo Salas, cofrade y experto en la obra de Antonio Eslava, que no sólo se detuvo en el interés de la talla de referencia, sino que profundizó en la universal trayectoria del artista.
Así, en pleno corazón de Sevilla, Bermudo desplegó sapiencia documental sobre la obra de su paisano Eslava, fallecido hace cuarenta años, y al que sigue investigando sobre su vida y su obra. Con un discurso didáctico y de perfiles sentimentales, el orador puso de relieve este concepto dual sobre el escultor del que dijo: “Para conocerlo como artista es necesario conocer la historia de su persona”. Por ello, arrancó con su inscripción bautismal en la iglesia carmonense de San Felipe, hasta sus últimos días en la residencia de la Caridad de Carmona.
Un interesante recorrido por la obra del imaginero desde sus primeras figurillas de terracota de la barrería San Mateo, puso de relieve y actualidad al artista, del que numerosas hermandades de Andalucía solicitan hoy datos y documentación relacionadas con obras patrimoniales salidas de sus manos. Así, Bermudo rubricó con textos históricos y documentación exhaustiva los pormenores de la dilatada vida profesional de Eslava.
Estudios, distinciones, coetáneos, anécdotas, encargos… y un sinfín de pormenores sobre tallas que hoy disfrutan decenas de hermandades de toda España, dejaron en el ambiente gratas sensaciones tras el discurso. En su final, Bermudo no dejó de rubricar su admiración permanente hacia Antonio Eslava y reiteró la necesidad de que su reconocimiento oficial vaya todavía a más. “Sueño con que Carmona, su localidad natal, lo reconozca pronto como Hijo Predilecto a título póstumo; y que Sevilla, lugar donde se formó y desarrolló su actividad artística, le tribute el homenaje que se merece, y rotule una calle o plaza con su nombre, o en el lugar donde vio la luz vuestra imagen titular, pudiera quedar constancia de tan importante acontecimiento, para así perpetuar su memoria”, concluyó.