La problemática de regularización de las urbanizaciones ubicadas en el término municipal de Carmona vuelve al candelero local, con el anuncio por parte de la Delegación municipal de Urbanismo del Ayuntamiento de Carmona de que “más de 1.500 vecinos y parcelistas van a iniciar en breve o han comenzado ya los trámites para desarrollar un proceso de regularización de sus viviendas”. La tramitación de expediente, afirman las mismas fuentes permitirá a los parcelistas el acceso a suministros básicos como agua y luz así como la inscripción en el registro de la propiedad.
Las urbanizaciones tendrán que presentar un plan especial de adecuación ambiental y territorial, que exige como base la nueva ley de impulso para la sostenibilidad del territorio de Andalucía, la conocida como LISTA. Con ella, la Junta de Andalucía intenta poner orden en las irregularidades endémicas de construcciones ejecutadas fuera del territorio urbano. En concreto en Carmona, la situación viene de lejos, cuando el negocio de centenares de millones de las antiguas pesetas, dejaban a los compradores de parcelas rústicas en situación ilegal.
Desde entonces (décadas), hasta hoy, el Ayuntamiento carmonense – sin capacidad operativa para afrontar las actuaciones urbanísticas al margen de la legalidad en el suelo rústico- ha afrontado con numerosas iniciativas el problema para poner coto al desajuste urbanístico, sin grandes resultados, como la creación, en su día, de la Oficina para la Regulación de las Urbanizaciones. Asimismo, los equipos técnicos de los servicios municipales advirtieron de la envergadura de la situación en el término carmonense, que afectaba a más de 400 parcelas. Con la reunión mantenida en el día de hoy, entre Gobierno Local y parcelistas, se abre una nueva dinámica que podría alcanzar objetivos en beneficio de las comunidades de propietarios de viviendas enclavadas en terrenos rústicos del municipio.