Mientras que la mayoría de los carmonenses se ven atraídos por las obras que se realizan para cambiar el pavimento de la monumental Plaza de San Fernando (Plazarriba), en otro lugar no tan lejano un grupo de trabajadores acogidos al Plan de Fomento de Empleo Agrario (antiguo PER) realizan tareas para devolver esplendor a uno de los parajes patrimoniales medioambientales más atractivos de Carmona: La Senda de la Pajarita o Cuesta La Pajarita.
El camino, frecuentado desde tiempos inmemoriales por cabreros y pastores en general, tiene su punto más bajo en el histórico Pilar Ancho; una obra de ingeniería acuífera tan desconocida como su entorno próximo. Su punto más alto: la Ermita de San Mateo, donde se une con el Camino Viejo y la cuesta que remata en el Mirador. Desde un lugar a otro, el proyecto realizado y supervisado por técnicos municipales de reconocido prestigio, abordan, desde hace unos días y hasta final de año, actuaciones en tramos del sendero.
En el Pilar Ancho se acometen obras de contención y derivadas de las problemáticas de erosión y desplazamientos del terreno, rectificaciones de canalizaciónes y conducciones de aguas, así como la consolidación del firme. En estos trabajos se está utilizando material del entorno del abrevadero con el objetivo de preservar la condición histórica y geológica del lugar, además se emplean, como elementos suigéneris y de respeto, las mismas medidas que se consignaron en su primitiva construcción.
Tras atravesar la antigua N-IV, hacia la mitad de la cuesta, se prevé una zona de descanso y esparcimiento, con arboleda y la recuperación del manantial y abrevadero del que discurría agua no hace tantos años, como aseguran los ganaderos próximos.
Su remate final, a los pies de la ermita de San Mateo, el proyecto adquiere mayor dimensión al unirse varios factores medioambientales. Por ello, se procede a la limpieza de la zona del escarpe que hasta ahora era escombrera, para a continuación colocar en vaguada placas de contención del terreno. Por otra, se culmina el tramo con un amplio mirador con vistas a la vega, que dispondrá de arboleda y zona de descanso.
Al igual que en el tramo del pilar abajo, los elementos constructivos de interés depositados a lo largo del tiempo en todo el sendero se integrarán en la nueva obra. De hecho, ya ha habido algún hallazgo de tipo histórico artístico que ha sido depositado en el Museo de la Ciudad. La actuación también dará lugar a estudios sobre acuíferos e interconexión de pozos, manantiales y abrevaderos en el subsuelo de este enclave del escarpe sur.