La línea de salida en el Real de la Feria registró sobre la bicicleta a 212 ciclistas para celebrar un día especial con una marcha que recorrió, como cada año, las calles de Carmona. Sin distinciones de categorías ni edades, el pelotón se mantuvo agrupado durante todo el recorrido y tan sólo se estiró en las duras rampas de subida al Alcázar. En un ambiente festivo y familiar, el Club Ciclista Carmona volvió a ser competitivo en organización, con un apoyo especial de seguridad con Policía Local y Protección Civil que hicieron más exitoso el evento.
Muchas caras conocidas del ciclismo carmonense, que dejaron el dorsal y la pugna en carretera por el chaleco logístico reflectante. Hoy tocaba una etapa relajada de convivencia, sin escapadas y sin esprint final. No hubo podio. El ganador fue el deporte, que lució el maillot verde del medioambiente.
REPORTAJE GRÁFICO
(búscate)